Según Ricardo Soca, citado en el sitio elcastellano.org, slogan proviene de la lengua gaélica y era un grito de guerra en las comunidades celtas que habitaban Escocia y parte de Irlanda. Añade que es una alteración de la palabra escocesa slogorne (sluagh-ghairm en gaélico, que respectivamente significan: multitud-grito).
Los publicitarios toman "eslogan" para designar una “frase fuerza”, que se aplica con fines de divulgación comercial o política.
En la imagen que acompaña esta nota, podemos ver un curioso volante que revela un eslogan de gran efectividad, difícil de olvidar y que seguramente al encontrarlo debajo de la puerta a más de uno habrá causado sorpresa para luego arrancarle una sonrisa.